Viridiana y la voluntad de poder

Contiene spoiler, dicho en un idioma no imperialista (al menos de este siglo), contiene destripe.

1. Resumen

Viridiana es la historia de una mujer y de un mundo. Un filme que es capaz de abarcar en sus márgenes la individualidad y la fuerza de la moral social. Trata de una mujer que sale del convento en el que pronto estará interna -como monja- para visitar a su tío, quien ha financiado su educación. A su llegada se encontrará con un hombre pervertido por un pasado que le atormenta. Tanta es la carga que le fuerza a pecar con su sobrina; no de manera consentida, sino todo lo contrario: cuando es rechazado en sus pretensiones y ella le anuncia su vuelta al convento, él, victimizándose, le pide que se vista como su difunta mujer, muerta el día de su boda -la causa de su pesar-. La seda con algún tipo de somnífero y se aprovecha de ella hasta donde su moral le permite. La vergüenza que sufre Viridiana por ese acto le obliga a abandonar dicho lugar, la finca de Don Jaime. Este mismo, acechado por la culpa y el pecado, se suicida, tras dejar escrita su herencia.

En dicha herencia deja la titularidad de todos sus bienes a Viriadiana y su hijo bastardo -Jorge- al que casi no conoce. Jorge y Viridiana compartirán casa a partir de entonces. La culpa y la imposibilidad de devenir monja  forzarán a Viridiana a dedicar su tiempo en el hampa del pueblo. A su vez, ese mismo grupo de marginados se girará en su contra una vez los introduzca en la casa. El centro de esta nueva trama es la voluntad de Jorge de convertir las yermas tierras de su difunto padre en terreno productivo, y su voluntad también de follarse a Viridiana.

 
2. Análisis

Para esta película se me ocurrió la idea de que Viridiana es una alegoría, como película y como personaje, de España y de su historia. Detrás de esta metáfora hay un tratamiento específico del pecado, la culpa y el perdón a través de un uso complejo de la técnica cinematográfica . Buñuel es, sin lugar a dudas, uno de los mejores directores de cine de España, tal vez el mejor. En un director de este tipo, todo se vuelve relevante y tiene una potencialidad de análisis. Viridiana presenta algunos de los temas que Buñuel tiende a exponer a lo largo de su filmografía, especialmente la religión. Durante su carrera, Buñuel mostró un extraño placer hacia la religión, concretamente la cristiana y católica; incluso llego a decir que cualquier cosa que no estuviera relacionada con la religión no tenía importancia para él. Se trata de una personalidad muy peculiar y, por lo tanto, muy interesante.

Dividiré mi explicación en dos partes, en base a las ideas que Buñuel y Alejandro (el coguionista) tenían sobre la película. Esto significa que la película principal está compuesta por dos tramas diferentes que están técnicamente y narrativamente opuestas. La primera parte que quiero comentar es la que va desde el comienzo de la película hasta la muerte de Don Jaime. Mi impresión al ver la película fue que esta parte representaba una historia completa, casi independiente, excepto por la permanencia del personaje de Viridiana. De hecho, se basa en un sueño que Buñuel tuvo cuando era joven, muy relacionado con la concepción que tenía del pecado en su juventud, fruto de una educación religiosa. El joven Buñuel soñaba que se colaba en un aposento real y podía gozar de la princesa dormida sin que ella se percatase.

Viridiana comienza con un plano de una iglesia. La historia será sobre eso, sobre salir de la religión. Veremos un tratamiento especial de la dimensión que envuelve el pecado y la culpa, a lo largo del largometraje, en la sociedad. Para el montaje, Buñuel a menudo utiliza la yuxtaposición en planos entre Jaime y Viridiana para mostrar la tensión entre las fuerzas que coexisten en la casa. Un ejemplo sería el momento en que Jaime toca el órgano mientras Viridiana está haciendo un rito religioso, o el episodio de fetichismo cuando está vestido como su mujer muerta y Viridiana, sonámbula, lleva a cabo un ritual críptico con connotaciones específicas sobre la muerte y el pecado. El uso de la música también es relevante, ya que solo lo escuchamos cuando sucede algo importante. En esta parte de la película, el entorno es muy importante, ya que da forma al comportamiento de los personajes. Sucede en una enorme casa rodeada de una gran extensión de tierra y, a pesar de eso, la acción ocurre en las mismas habitaciones y espacios. Sumado a la voluntad de Buñuel de no mostrar ninguna referencia temporal, esto crea un ambiente de antigüedad, anticuado y una sensación de límites tangibles y fronteras que suponen un obstáculo para la libertad de los personajes. Es, por lo tanto, un lugar puro y sin pecado, o, como Jaime le dice a Viridiana: «Estarás como en el convento». La edición es muy narrativa, podemos decir que es continua y los planos son relevantes para analizar a los personajes, precisamente para Jaime, ya que a menudo recibe planos picados (desde abajo). Al abordar este tipo de moral societaria, Buñuel dibuja un retrato de la España que encontró en su llegada después de su exilio: dejó una España que estaba viviendo un proceso de modernización con la Segunda República, y al volver descubrió una país que atravesaba un período de regresión debido al régimen franquista. Una España donde la moral y la tradición, por un lado, y el régimen político, en el otro, eran herramientas para moldear las mentes.

En otra unidad, como segunda película, tenemos la parte que va del plano de los pies de Jaime colgando del árbol (el mismo árbol del principio); hasta el final. En términos de técnica, Buñuel comienza a usar otros tipos de planos y edición. Por ejemplo, cuando Viridiana lleva a la gente pobre -llamada en español «el hampa»- para rezar el llamado Angelus, la edición se vuelve discontinua y Buñuel yuxtapone los planos y los ruidos de el trabajo de restauración de la casa de Jaime y la oración que Viridiana canta. Es una técnica de corte transversal que produce un sentimiento e idea específicos, esto se llama montaje intelectual. Es una metáfora del poder de la materialidad cuando enfrenta la espiritualidad, llega, de hecho, a silenciar la oración. Además de esta parte, una gran diferencia en comparación con lo que se indicó anteriormente es la presencia de muchos personajes que aportan más complejidad al largometraje, como lo hace la técnica. Más personajes significan más diversidad dentro de la trama y esa es una oportunidad para que Buñuel comience a usar más diversidad en la técnica, ya que hay más historias dentro de la película que se pueden filmar y contar. Es por eso que podemos hablar de una distancia dentro de la película entre las dos partes. Esto se traducirá en cómo se trata a la comitiva y, también, la noción de tiempo. Debido a la llegada del hijo de Jaime, se estampa un nuevo aura en la casa y en los campos, que la rodean. Jorge intenta y quiere sacar provecho de cada rincón de la tierra, podemos empezar a hablar sobre la llegada del liberalismo y la moral capitalista que entra dentro de la casa y, por lo tanto, en la vida de Viridiana.

Creo que el tema principal que debemos tratar cuando analizamos Viridiana es el proceso que la lleva a decir no a Jaime y que provoca su rendición ante Jorge. En ambos casos, Jorge y Jaime, son pecadores si tomamos el punto de vista moral y lo analizamos a través de la religión. Antes de tratar de comprender esto, debaríamos la diferencia entre los códigos morales y una moralidad al actuar. El primero, significa la forma en que alguien o una sociedad propone, piensa y teoriza para comportarse con respecto a algo que juzgan moralmente incorrecto. El segundo es el comportamiento real otorgado a estos códigos morales. La pregunta es: ¿Por qué consideramos moralmente incorrectas las acciones que emprende Jaime y no las que realiza Jorge? Creo que la respuesta es sobre qué códigos morales tienen. Como Jaime es alguien torturado por su pasado por la imposibilidad de tener relaciones sexuales debido a las normas sociales que decidió seguir, es moralmente condenable cuando, deshaciéndose de sus ideas sobre lo que está mal, decide violar a su sobrina y cometer el pecado. Por otro lado, sin embargo, sabemos que Jorge no tiene ningun tipo de moral en este campo, en el sexo, ya que está teniendo relaciones sexuales con una mujer fuera del matrimonio. Entonces, actuando como él piensa, no es condenable. Para decirlo de otra manera, la idea del pecado, que es un autocontrol hacia un impulso animal, está en el lado de Jaime como una prueba de debilidad. Pero no en la de Jorge, porque es capaz de ejecutar este tipo de poder que va dentro de la masculinidad. Don Jaime es un pecador, Jorge es un Don Juan. Jorge demuestra una especie de poder, una voluntad de poder, como Nietzsche decía, y siempre está en proceso de conquista. Por eso Viridiana se da por vencida y se rinde a los brazos de Jorge, él es más poderoso. Es un verdadero macho. Su fuerza reside en el abandono de la moral cristiana. 

Otro punto interesante reside en el concepto de culpa. Recuperaré el artículo de Roc Solà para abordarlo. Es fundamental para entender la culpa y la dimensión que recoge. Es tremendamente ilustrativo el proceso que atraviesan los personajes para entender la respuesta que presentan frente a la culpa. Existen tres: la exteriorización, la interiorización y su negación. Quien la exterioriza es Don Jaime: se suicida. Para él, culpa y castigo sobre el cuerpo son sinónimos. Como diría Foucault, el castigo físico supone un acto de significación y de explicitación de lo que conlleva ser un outsider social. Don Jaime es un outsider. Quiere casarse y tener relaciones sexuales con su sobrina, pero no solo eso, también le pide que disfrace de su mujer muerta para hacerlo. No es solo outsider, es un enfermo social. El acto de suicidio es enigmático; lo podemos ver como un acto de venganza. Sabe que su sobrina, católica y beata convencida, va a sentir pena por su pérdida, más aún, si lo hace después de sentir su rechazo. Y sentir pena por la muerte de Don Jaime es solo un síntoma de la interiorización la culpa. Por esa razón, por la interiorización, explicará el porqué de su dedicación hacia el hampa. Se trata de una expiación, una purga del sentimiento de culpa. Mientras, q el superhombre -el übermensch nietzscheano- que es Jorge, no siente culpa. La ha erradicado, exterminado de su ser.

 
3. Conclusiones

Lo único que puedo constatar a fecha de hoy, después del paso del tiempo, es que Viridiana no es una fábula de un tiempo que hemos superado. Es una historia más contemporánea que nunca. Tanto culpa, como la incidencia de la moral, son ejes importantísimos para entender nuestro mundo. Solo hace falta recuperar el caso de la Manada, por ejemplo. El castigo, en teoría, debería ser proporcional al agravio. Nunca deberíamos concebir un castigo en función de la culpa. La Inquisición trataba de eso.